1. La copa menstrual tiene la misma edad que tu abuela
El primer dato de los cinco datos curiosos sobre las copas menstruales parece extraño, ya que aunque parezca nueva, la copita fue creada en los años 30. Sí, así como lo oyes, han pasado más de 80 años y hasta ahora es más accesible para todas las mujeres. Primer patente publicada por Leona W. Chalmers, creó una copita de caucho vulcanizado. Luego se crearon otras a base de látex, sin embargo, se dejaron de fabricar debido a la gran comercialización de toallas sanitarias.
Además de que los primeros diseños de copas eran muy rígidos, grandes y pesados, la cultura en ese momento era distinta y el tema era todo un tabú. Fue hasta el año 2000 que se fabricó la primer copa a base de silicón quirúrgico, donde inició un cambio radical en los productos para la menstruación, sigamos viendo más de los cinco datos curiosos sobre las copas menstruales.
2. Sólo necesitas 4 copas en toda tu vida
La copita está hecha de silicón quirúrgico, mismo material utilizado en los implantes de seno, catéteres y marcapasos. Este material es aceptado por el cuerpo, no libera ni absorbe sustancias, además de que es totalmente hipoalergénico por lo que no causa alergias a diferencia de otros productos femeninos, los cuales contienen componentes químicos como el rayón. La copa dura hasta 10 años, se debe cambiar cuando el material muestra señales de desgaste. Por lo que sí en promedio a las chicas nos llega la menstruación entre los 10 y 15 años (menarquía), y entramos en el proceso de menopausia a los 40-45 años, sólo necesitaremos 4 copas en toda nuestra vida menstrual.
3. Se puede utilizar desde la primer menstruación
No importa si has tenido relaciones o no, la copita se puede usar a cualquier edad, desde chicas adolescentes hasta mujeres con hijos. La preocupación inicial es “perder la virginidad” pero esto es solo una construcción social. La copa a diferencia de los tampones, se adhiere a las paredes vaginale. Si la colocamos adecuadamente y con delicadeza no habrá ningún problema. Lo importante con el uso de la copa es el autoconocimiento, pronto hablaremos sobre el himen, la posición del cérvix y otros parámetros relevantes a la hora de escoger la talla ideal.
4. Es imposible que una copita se quede dentro del cuerpo
Las mujeres tenemos un “límite” llamado cuello uterino, el cual tiene el diámetro de una pajilla, por lo que sólo mediante un proceso quirúrgico podría ingresar un objeto. La copita se coloca en el canal vaginal por lo que si tenés una talla adecuada. Si sigues los pasos para quitarla y ponerla no hay ningún peligro. Los músculos pélvicos son excelentes aliados solo es de empezar a utilizarlos.
5. La copita se puede utilizar en todo momento
Desde nadar, alzar pesas, correr, estar en la oficina, dormir hasta para relaciones sexuales externas. Una vez aprendemos a colocarla adecuadamente, la copita se puede utilizar libremente. Nos facilita la vida y nos brinda muchísima comodidad ya que la podemos tener dentro de nuestro cuerpo hasta por 12 horas. Lo único que tenemos que recordar es quitarla, ya que es tan cómoda que no la sentimos y no se nos puede olvidar que la llevamos puesta.